lunes, 7 de julio de 2014

Socios con Dios en la Oración

pradera verde Porque vuestro Padre sabe de qué cosas tenéis necesidad, antes que vosotros le pidáis. Mateo 6:8
Un hombre orgulloso de su trabajo mostraba a su amigo en lo que había convertido una descuidada fracción de tierra. Señalando con sus manos al terreno dijo: "Observa, he transformado esta vieja parcela abandonada en un hermoso jardín florido". Su compañero sonriendo contestó: "Mas bien deberías decir ¡Contempla el buen trabajo que hemos hecho aquí con Dios!". El hombre pensó un instante y habló de nuevo: "Tienes razón, pero tendrías que haber visto lo desprolijo que estaba este lugar cuando Dios lo cuidaba por si solo"

Da un poco de risa la respuesta del jardinero, pero manifiesta una gran verdad espiritual. Los cristianos somos colaboradores con Dios, y esto se aplica a todas las áreas de la vida, incluso a la oración. Y nos responde una pregunta que muchas veces nos hacemos cuando meditamos sobre las palabras dichas por El Señor en Mateo 6. Allí nos enseña que al orar no es necesario que usemos vanas repeticiones como lo hacen los gentiles, porque nuestro padre sabe de lo que tenemos necesidad antes de que se lo pidamos (Mateo 6:7-8).

Entonces la pregunta es, ¿Por qué nos demanda que oremos?, la respuesta es bien sencilla y muy reconfortante. Dios nos ha dado el honor de ser sus socios en los lugares físicos y espirituales. A través de la oración colaboramos con él para vencer las fuerzas de maldad en las regiones celestes y para que se cumplan sus planes de amor en las vidas de todos los hombres. 
¿Hermano te has dado cuenta? ¡Tu y Yo somos socios con el Creador del mundo!. Ésto sin dudas es un gran privilegio y el incentivo mas motivador para orar!.

                                                                                     
Marcel Amorín