"Un mandamiento nuevo os doy: Que os améis unos a otros; como yo os he amado, que también os améis unos a otros. En esto conocerán todos que sois mis discípulos, si tuviereis amor los unos con los otros". Juan 13: 34-35
Estudiando las Escrituras podemos ver como Dios usó y muchas veces las palabras "unos a otros" y " unos con otros" para enseñarnos la manera correcta en la que debemos relacionarnos entre creyentes: "soportándoos unos a otros", "perdonándoos unos a otros", "exhortaos los unos a otros", "instruirse unos a otros", sed benignos unos con otros", "sed misericordiosos unos con otros"... y la lista es larga, pero sin dudas "Amaos los unos a los otros" es la esencia de todas ellas.Jesús nos dice que debemos amarnos unos a otros así como él nos amó. Está claro, su amor es inmenso y sería imposible igualarlo, pero él nos está diciendo que debemos seguir su ejemplo. Su amor es incondicional, y no se basa en nuestra apariencia física o personalidad, ni siquiera en nuestros buenos sentimientos. Él no pone ninguna condición para amarnos.
Jesús demostró su amor a través de sus acciones. Se humilló a sí mismo dejando su trono en el cielo y viniendo al mundo en el cuerpo de un frágil bebé, vivió entre nosotros como un hombre mas, fue humillado, despreciado, sus últimos días en la tierra sufrió terribles torturas, y murió crucificado como un criminal. Nadie podría explicar con palabras la profundidad de ese amor como él lo explicó con sus acciones.
Medita en esto..
Casi por regla general las personas tendemos a ver el amor como un sentimiento, y luego de experimentarlo llega la acción. Piensa en alguien de tu Iglesia, tu trabajo, o de tu familia, a quien por equis motivo te cueste amar, tu sabes que debes amar a esta persona, pero sería mucho más fácil si la actitud de ella hacia ti fuera diferente. Jesús nos dice que debemos amar sin condiciones, nos enseña que debemos dar amor a través de hechos, incluso cuando no "sentimos" que debemos hacerlo.
Amigo.. si de alguna forma te has identificado con este mensaje, entonces esta palabra es para ti. Te animo a que desde hoy pidas ayuda al Señor para poder ver a esas personas a través de sus ojos y no de los tuyos, pídele que te enseñe a amarlas sin importar si "merecen" o no tu amor. Luego da un paso de fe y demuéstrales amor a través de tus acciones.
Recuerda que tu y yo somos parte de la gran familia de Dios, y como tal tenemos el deber de brindar amor a los demás, así como Jesús lo brindó, gratis e incondicional. De esta forma sabrán que somos sus discípulos (Juan 13:35) y nuestro amor por ellos podrá acercar sus vidas a Jesús. Dios Te Bendiga!
Marcel Amorín
